Llegados a ciertos niveles en el pádel, y no hablo sólo a nivel profesional, es muy importante mantener un buen aspecto físico que te ayude a la hora de jugar. Para ello, los jugadores profesionales de pádel se rodean de preparadores físicos.
Tenemos que saber diferenciar como va a ser nuestra preparación física dependiendo de nuestro nivel. No podemos exigirnos de buenas a primeras unas metas similares a las que se ponen los profesionales del pádel. Estos le dedican varias horas al día a está faceta, convirtiéndose en una rutina.
Está claro que para una buena práctica de pádel es necesario cumplir con diversos factores, tales como psicológicos, técnicos, tácticos y físicos. Si uno de ellos brilla por su ausencia seguramente no podamos desplegar nuestro mejor pádel.
La preparación física va a repercutir positivamente a nuestro juego. ¿Cuantas veces hemos achacado un fallo a nuestra técnica cuando el problema ha sido que hemos llegado a la bola tarde? Es más, ¿cuantos partidos hemos perdido contra rivales peores técnicamente pero que nos devolvían todas las bolas debido al gran físico que tenían?
Si tu práctica del pádel es muy leve, es normal que lo que se quiere es disfrutar jugando los dos ratos que juegas a la semana ya que el trabajo o tus obligaciones familiares alomejor no te permiten más. Pero cuando juegas 4-5 veces y luego tienes torneos los fines de semana, es un aspecto fundamental a tener en cuenta y se recomienda. Es aconsejable, en ese caso, ponerse en manos de un preparador físico.
No nos olvidemos que también es un tema importante para evitar posibles lesiones. Cuando llevamos a nuestro cuerpo a niveles de exigencia que no está acostumbrado lo podemos acusar y sufrir alguna lesión de gravedad.
Bien apuntado, el apartado físico es vital a medida que vas avanzando de nivel, diría que incluso más importante que la técnica... Saludos!
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